Y desearía ofrecerte en este instante
el aroma que de mí se desprende
a hembra hambrienta de tu presencia.
Y ya mis manos me recorren
totalmente y totalmente
descubren en mi desnudez tu desnudez.
Y temblorosa, apestando
al deseo de que me atravieses
y surques mi hambruna
como solo tú sabes hacerlo,
entonces, de imprevisto,
justo en el centro del reflejo
que el reflejo del espejo
me concede, más allá,
apoyado sobre el umbral
de la puerta, sonriendo,
te descubro, saboreando
en silencio el silencio
con el cual te imploro a gritos
que hagas de mí tu hembra,
que hagas de ti mi reflejo,
que hagamos de nuestros
cuerpos un eterno único universo.
~~~ ღ @ AriaDna ღ~~~
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